¿Rito alterno y de igual valor a la Comunión en la boca?

¿o "indulto" por no comulgar de la forma tradicional?

Aquí resolvemos esas dudas


12/8/12

Texto de la aprobación inicial dada por SS Paulo VI

En la foto, SS Beato Juan Pablo II entrega la Comunión en la mano a unas jóvenes


TEXTO DE LA APROBACIÓN INICIAL DADA POR EL PAPA PAULO VI A LA COMUNIÓN EN LA MANO:

SAGRADA CONGREGACION PARA EL CULTO DIVINO, Carta "En respuesta a la petición", para aquellos presidentes de las Conferencias de Obispos que solicitaron permiso para entregar la comunión en la mano 29 de mayo de 1969: AAS 61 (1969) 546-547; Not 5 (1969) 351-353.

"En respuesta a la solicitud realizada por su conferencia de obispos, en referencia al permiso solicitado de dar la comunión poniéndola en la mano de los feligreses (La Comunión en la mano se establece por primera vez en la Iglesia POR SOLICITUD DE PARTE DEL COLEGIO DE OBISPOS), yo deseo comunicarle lo siguiente : El Papa Pablo VI llama la atención, al propósito establecido en la "Instruction Memoriale Domini " del día 29 de mayo de 1969, de mantener la práctica tradicional en uso (pide que no se acabe la práctica tradicional por establecer un nuevo rito). Al mismo tiempo, HA TOMADO EN CONSIDERACIÓN LAS RAZONES DADAS PARA APOYAR SU SOLICITUD y por el resultado de la votación obtenida en esta materia,

"EL PAPA OTORGA QUE EN TODO EL TERRITORIO CORRESPONDIENTE A SU CONFERENCIA CADA OBISPO* PUEDA DE ACUERDO A SU JUICIO PRUDENTE y A SU CONCIENCIA AUTORIZAR EN SU DIÓCESIS LA INICIACIÓN DEL "NUEVO RITO" PARA DAR LA COMUNIÓN(llama a la Comunión en la mano "NUEVO RITO", no "indulto" por estarse cometiendo una falta al tomarla de esta forma, o norma pasajera, o algo parecido). La condición es que se evite completamente cualquier causa que pueda escandalizar a los fieles, y cualquier peligro que pueda generar irreverencia hacia la Eucaristía.

SS el Papa Paulo VI con Mons. Karol Wojtila, Arzobispo de Cracovia y después su sucesor en el trono de Pedro




"Las siguientes normas deben ser por lo tanto respetadas:

1. LA NUEVA FORMA DE ENTREGAR LA COMUNIÓN no debe ser impuesta de manera que sea excluída la práctica tradicional (la que pide mantenerse al tiempo con la de la mano). Es una materia muy seria, y por lo tanto, en los lugares donde se permita esta NUEVA PRÁCTICA todos los fieles deben tener la opción de recibir la comunión en la lengua, aunque otras personas la estén recibiendo en la mano. LAS DOS MANERAS DE RECIBIR LA COMUNIÓN PUEDEN SIN DUDA ALGUNA LLEVARSE A CABO EN EL MISMO ACTO LITÚRGICO (no dice que una es mas valiosa que la otra. Cristo no está menos presente ni es menos eficaz sacramentalmente por estar primero en las manos de unos fieles que en la boca de otros, ni recibe menos adoración de unos que de otros).

Hay un doble propósito en esto: que nadie encuentre EN ESTE NUEVO RITO algo que altere su devoción personal a la Eucaristía, y que este Sacramento, que es fuente y causa de unidad, no se transforme en OCASIÓN DE DISCORDIA ENTRE LOS FIELES (pide a los fieles no entrar en discordia con los que la toman de esta nueva forma por ser un rito diferente, lo que muchos desobedecen).

2. EL RITO DE RECIBIR LA COMUNIÓN EN LA MANO no debe ponerse en práctica de una manera discriminada. Dado que la cuestión involucra actitudes humanas, este modo de comunión está ligado a la percepción y la preparación del que la recibe. Es recomendable por lo tanto que EL NUEVO RITO se introduzca gradualmente, y que se haga al principio en grupos pequeños y bien preparados, así como en un ambiente favorable.

Sobre todo, deberá ser precedido por una catequesis efectiva, para que las personas entiendan el sentido de recibir la comunión en la mano, y que lo practiquen con la reverencia debida al Sacramento. Esta catequesis debe lograr excluir cualquier indicación de que haya en la mente de la Iglesia una disminución en la fé de la presencia Eucarística y excluir también cualquier posibilidad de peligro o amenaza de peligro de que se profane la Eucaristía.

3. La OPCIÓN OFRECIDA A LOS FIELES DE RECIBIR EL PAN EUCARÍSTICO EN LA MANO PARA LLEVÁRSELO DESPUÉS A LA BOCA no debe dar ocasión para creer que es pan ordinario u otro artículo religioso más. Al contrario, esta opción debe incrementar en ellos y hacerlos conscientes de la dignidad de los miembros del cuerpo místico de Cristo, al cual han sido incorporados por el bautismo y por la gracia de la Eucaristía. Debe también aumentar su fé en la sublime realidad del cuerpo y la sangre de Cristo, LA CUAL TOCAN CON SUS MANOS. Su actitud de reverencia debe estar conforme a lo que están haciendo (dice que la reverencia no se pierde por tomar a Cristo en las manos, sino que es una actitud del fiel, sea que la tome en la mano o en la boca, y que se debe mantener en alguno de los dos ritos).

4. Al respecto de la manera de implementar el NUEVO RITO: un posible modelo es el usado tradicionalmente, el cual expresa las funciones ministeriales y es que el sacerdote o diácono pone la hostia en las manos de los fieles. Alternativamente, es permisible adoptar un procedimiento más sencillo, permitiendo a los comulgantes tomar la hostia del ciborio o la patena (se prohibió después esto). La hostia debe ser consumida antes de regresar a sus asientos; el ministro usará el formulario de costumbre diciendo "Cuerpo de Cristo", a lo cual replicará el comulgante con la palabra "Amén".

SS el Papa Benedicto XVI entrega la Comunión a Carmen Hernández, iniciadora con Kiko Arguello del Camino Neocatecumenal, grupo en el que se usa el nuevo Rito desde sus inicios.


5. Cualquiera que sea el procedimiento adoptado SE DEBE PONER ESPECIAL CUIDADO EN NO PERMITIR QUE PARTÍCULAS DEL PAN EUCARÍSTICO CAIGAN AL SUELO o SEAN DESPARRAMADAS. Los comulgantes DEBEN TENER LAS MANOS LIMPIAS y SU COMPORTAMIENTO DEBE SER CONFORME A LAS COSTUMBRES (en esto todos debemos poner especial cuidado, por ejemplo revisando la mano izquierda después de comulgar por si han quedado migas y también consumirlas).

6. En el caso de comunión en las dos especies, por la vía de la intinción (mojando la Hostia en el vino antes de darla al fiel), nunca se permite poner en las manos del fiel la hostia que ha sido sumergida en la sangre de nuestro Señor.

7. Los obispos que autoricen la introducción de ESTA NUEVA FORMA DE RECIBIR LA COMUNIÓN deberán enviar, después de 6 meses, un reporte a esta Congregación informando sobre los resultados de esta concesión" (se habla aquí de "concesión" en el sentido de que con este documento ha sido concedida la aprobación del Nuevo Rito, no que por ello se deba entender que es de menor importancia que la Comunión en la boca o que es un "indulto" porque con su práctica se estaría usando una forma diferente o menos valiosa que la ordinaria).

*aunque la autorización dada aquí para la implementación del nuevo Rito de Comunión se concede a quienes específicamente solicitaron este permiso, en la práctica es una autorización universal para que cada Obispo la pueda implementar en su Diócesis con estas reglas, lo que efectivamente se oficializó con la Instrucción "Inmensae Caritatis", publicada abajo.

Nota: las mayúsculas para resaltar una frase, los comentarios en paréntesis y la nota al pie de página y de las fotos son nuestros.